Consejos para la congelación de la carne.
La congelación de la carne, es el método ideal para conservarla por mayor tiempo sin alterar sus nutrientes e impedir la formación de bacterias.
En el blog de hoy vamos a tener en cuenta algunos consejos para hacerlo de forma correcta, ya que en ocasiones alimentos mal congelados pueden ser causa de enfermedades:
· Los filetes, una vez eliminada la grasa superflua de la carne, se empaquetan en porciones individuales, o bien superpuestos con una hoja de papel de aluminio o plástico de cocina intercalados. Luego se introduce en una bolsa de congelación bien cerrada, a la que previamente se extrae el aire.
· Las piezas grandes de carne para asar se envasan en bolsas de polietileno especiales para la congelación, herméticamente cerradas y sin aire. Se sigue el mismo procedimiento con la carne troceada para guisar.
· Una vez envasada la carne, según proceda, se somete a una congelación rápida, colocándola en el estante de congelación rápida o, si el congelador es de una sola pieza, lo graduaremos al frío máximo hasta que se congele. Luego se pasa a uno de los compartimentos de mantenimiento, en el primer caso, o se gradúa a temperatura normal. Se conserva de 6 a 8 meses, según la carne.
· La descongelación se lleva a cabo en la parte menos fría de la nevera. Las partes grandes precisan de un período de más de 24 horas; las pequeñas tienen suficiente en una hora. No es aconsejable descongelar la carne a temperatura ambiente.
La carne descongelada no se puede volver a cocinar cruda, pero si la cocinamos podremos congelarla sin ningún inconveniente.